Entre miles de ilusiones perdidas que aún no se han escrito
Y miles de lágrimas que sobre tu rostro están por llover
Vuelvo a verte como un sueño que no se ha ido
Definido y taciturno, que permanece aún después del amanecer
Como un espectro del pasado que renace en un suspiro
Como una sombra en mi presente que no logro desvanecer
Y que en el espejo revela su imagen, su reflejo furtivo,
Eclipsando mi propio rostro y mostrándome a cambio su tez
Recordándome acaso que somos un todo indistinto
De la misma luna dos fases, dos personas unidas en un solo ser;
Pues en un pacto secreto te presté mi alma (mi espíritu)
Haciendo de mi vida la tuya, dándole a mi corazón tu piel
Y a cambio tú me regalaste tu historia en un escrito
Sometiendo tu destino a mi pluma y a un papel
Y escondiendo mi nombre entre las páginas de un libro
Cambiándolo por el tuyo, Isabel
Isabel…