Lagunas Del Alma
Dile a la roja, roja Luna Que he dejado el corazón Escondido en la laguna, Y que he sepultado mi canción -Aquella historia que hoy hace...
No conozco suicida más exquisito que un poeta. Avivar la herida y usarla como tinta, podría considerarse una eutanasia. Pero le llamamos poesía porque, lejos de matarnos, nos hace sentir vivos. Y eso es un arte.